¿Un museo en el que no solo son bienvenidas las fotos a las obras sino que está pensado expresamente para que te retrates junto a ellas? Sí. Lo acaban de inaugurar tras dos años de preparación en Pattaya, Tailandia.

El museo Art in Paradise (Arte en el Paraíso) exhibe 140 obras pintadas por 12 artistas coreanos que juegan al 3D -si utilizamos la terminología moderna- o al trampantojo, si preferimos la clásica. 

Imagen
Así, uno puede acercarse por fin a la Mona Lisa de Leonardo o a la Venus de Boticelli, tocarlas y hacerse fotos con ellas sin ser arrestado. Pero también se puede empujar un rinoceronte, gritar ante un tiburón o bailar con un dinosaurio. "Nuestro arte es distinto. Añadimos algo a cada pintura porque queremos que sea divertido", ha dicho el director del museo, Shin Jae Yeol.

Art in Paradise es un proyecto de un grupo de hombres de negocio coreanos y está ubicado en un ex club nocturno. Shin explica que la idea nació cuando él trabajaba en Love Land, un parque tematico al aire libre de figuras en posturas sexuales, en Cheju, Corea del Sur. Un inversor se le acercó y le pidió que montaran uno igual en Tailandia. Aunque el proyecto se frustró al no conseguir permisos del ministerio de Cultura del país, la idea acabó convirtiéndose en el museo del arte en 3D.

Fuente: RPP



 
Imagen
Japón, un país rico en mitología y tradiciones ancestrales, nos sorprende desde el 13 de agosto con el Obon お盆  o simplemente Bon 盆, una festividad de carácter semi-religioso que rinde culto a los espíritus fallecidos de los antepasados.

El Obon fue una costumbre de origen budista que en la actualidad se ha establecido dentro de la cultura japonesa, cualquiera que fuera el credo que profesen. Así mismo es una ocasión para la interacción con la comunidad. Se celebra desde hace 500 años e incluye danzas y bailes como el Bon Odori, o festivales como el Gozan no Okribi.

Cuenta la leyenda que Maha Maudgalyayana (Mokuren) un discípulo de Buddha, intentó contactar a su madre muerta, haciendo uso de sus poderes descubrió que esta había caído en el reino de los fantasmas hambrientos y sufría. Afligido, le preguntó a Buddha cómo liberarla, este le dio instrucciones para hacer ofrendas el día quince del séptimo mes. Tras hacerlo, Maha pudo ver a su madre y ella, feliz por su liberación, bailó con entusiasmo. De esta danza se desprende el Bon Odori, una festividad en la que los antepasados y sus sacrificios son recordados y apreciados.

Agosto es un mes caluroso en el país del sol naciente ya que las altas temperaturas del verano incluso logran sofocar y hasta enfermar a parte de la población. Para prevenir agotarse con ropa incómoda los participantes del Bon, suelen usar yukata o kimonos de algodón ligero para las numerosas celebraciones como grandes carnavales con desfiles, juegos y comida típica como la sandía.

El festival de Obon dura tres días, aunque su fecha de inicio varía en diferentes regiones de Japón. El calendario lunar tradicional se cambio al calendario gregoriano con el comienzo de la era Meiji, aunque las localidades de Japón reaccionaron de manera diferente y esto se tradujo en tres celebraciones diferentes de Obon:

1.- El Shichigatsu Bon ("Bon" de julio) se basa en el calendario solar y se celebra 13 y el 15 de julio, principalmente en la Región de Kanto (Tokio y Yokohama) y la Región de Tohoku).

2.- El Hachigatsu Bon ("Bon" de agosto) se basa en el calendario lunar y se celebra entre el 13 y el 15 de agosto, constituyendo la fecha más común de celebración en el país (especialmente en Kansai).

3.- El Kyu Bon (Bon Antiguo) se celebra el día 15 del séptimo mes del calendario lunar, y por lo tanto difiere cada año; El "Kyu Bon" se celebra en áreas como la parte norte de la región de Kanto, región de Chugoku, Shikoku e Islas Ryukyu.

Estos tres días no están registrados como días oficiales de vacaciones, aunque generalmente suelen concederse vacaciones cuando tienen lugar las celebraciones.

Por SK
ACIEPA

 
Imagen
Decenas de miles de personas conmemoraron el lunes 6 de Agosto el 67  aniversario del bombardeo atómico ocurrido sobre la ciudad de Hiroshima por parte del ejercito estadounidense al final de las segunda guerra mundial. La población comenzó desde el domingo 5 de Agosto en la noche a recordar a las víctimas del ataque nuclear.

Sobrevivientes, familiares de las víctimas, funcionarios de gobierno y delegados extranjeros asistieron a la ceremonia anual en Hiroshima en el Peace Memorial Park para recordar que el avión bombardero B-29 llamado Enola Gay, dejó caer una bomba atómica el 6 de agosto 1945, convirtiendo a la ciudad occidental de Japón en un infierno nuclear, matando a unas 140,000 personas.

Muchos sobrevivientes de la bomba atómica se oponen al uso militar y civil de la energía nuclear, recordando a las decenas de miles de personas que murieron de forma instantánea en Hiroshima y muchos más quienes más tarde murieron a causa de diversos tipos de cáncer originados por la radiación.

En las últimas semanas, Japón ha visto una serie de protestas antinucleares desde que el primer ministro Yoshihiko Noda ordenó el pasado mes de Junio el reinicio de dos reactores.

Noda, defendió la medida alegando la inminente escasez de energía, después de Japón apagó sus 50 reactores nucleares a raíz de la catástrofe de Fukushima.

Noda asistió a la ceremonia del lunes junto con una serie de diplomáticos extranjeros, entre ellos el embajador de EE.UU. en Japón, John Roos, quien se convirtió en el primer funcionario enviado de EE.UU. en asistir a la ceremonia desde hace dos años.

“Estados Unidos espera con interés continuar trabajando con Japón para avanzar en el objetivo del presidente (Barack) Obama de hacer realidad un mundo sin armas nucleares”, dijo en un comunicado la embajada.

Un segundo bombardeo atómico se realizó tres días después sobre la ciudad de Nagasaki, matando a más de 70,000 personas.

Fuente: AFP/YEA/Yumeki